Ayer mi esposo, mis hijos y yo hemos regresado de nuestras (riquísimas) vacaciones de verano y hoy nos reintegramos a la rutina nuevamente.
Retomar todo no es fácil, ¡sobre todo cuando hemos estado descontrolados por casi un mes!
Pero tenemos muchísimas ganas de hacerlo, especialmente yo que tengo una razón bien particular.
El próximo 6 de octubre hay un evento súper especial al cual asistiré por primera vez y para el que necesito verme espectacular (luego te cuento de qué se trata). Será mi oportunidad de llevar mi cuerpo al mejor estado posible luego de haber dado a luz, hace ya prácticamente un año (¡cómo pasa el tiempo!).
¡Así que tengo un mes para lograrlo!
Y para asegurarme de que tendré éxito en este nuevo Reto Fitness personal, voy a utilizar una estrategia infalible que te voy a revelar a continuación y que tú también deberías adoptar de ahora en adelante para que tengas el éxito asegurado la próxima vez que te propongas una meta.
Si alguna vez te has propuesto una meta de adelgazamiento o de ejercicios y has fallado en cumplirla, te puedo asegurar que es porque has estado cometiendo un error muy común a la hora de medir tus resultados. Y hoy te voy a enseñar cómo evitarlo.
¿Cuántos Kilos Quieres Perder?
Esta es una pregunta a la que todo el mundo tiene respuesta.
Todos tenemos en la mente una especie de «peso ideal» que queremos alcanzar. Quizás es el peso que teníamos cuando éramos más jóvenes, o tal vez es el peso de aquella persona que se ve como nosotros queremos vernos. Tal vez es el peso que dijo el médico, o el peso para que el IMC nos quede en el rango «normal».
Tal vez simplemente vimo scómo hemos venido engordando unos 5 kilos desde hace tres meses y ahora queremos quitárnoslos de encima a como dé lugar. Tal vez son los 10 kilos que ganamos de más en el embarazo, o durante los estudios universitarios, o desde que dejamos de fumar, o luego de la menopausia.
El caso es que nos centramos muchísimo en el número que arroja la báscula, ese aparato desgraciado cuyo objetivo principal es hacernos la vida imposible.
Entonces, cada vez que nos proponemos alguna meta de adelgazamiento, la expresamos en términos de los kilos que queremos perder. Nos ponemos una fecha límite, y muy contentos vamos y decimos:
¡Voy a perder 5 kilos en un mes!
Y ahí mismo hemos firmado nuestra sentencia: vamos a fracasar.
¿Por qué? ¿Cuál es el problema con plantearse un objetivo así?
Tu Cuerpo Actúa Como Si Tuviera Vida Propia (¡Porque la Tiene!)
El problema está en que tu cuerpo no responde a lo que tú le ordenas.
Si tú dices «Voy a perder 5 kilos», tu cuerpo probablemente no te complacerá.
Incluso si tú sabes lo que tienes que hacer para comenzar a adelgazar, ¿tienes alguna manera de controlar exactamente el peso que pierdes?
¿Hay alguna forma en que puedes determinar exactamente cuántos kilos perderás cada semana, o al cabo de un mes?
Supongamos que empiezas a cuidarte con lo que comes y con las cantidades. Supongamos que no ocurre absolutamente nada de especial: no se te atraviesa ningún cumpleaños, ni ninguna visita, ni ninguna emergencia en el trabajo. No hay absolutamente nada que te llegue de improvisto y te haga la vida cuadritos justamente cuando tratas de comenzar con tu dieta y tus ejercicios (poco probable, pero sígueme el juego).
Supongamos que haces todo a la perfección durante las dos primeras semanas. Y aún así, tu cuerpo decide que en lugar de perder los dos o tres kilos que corresponden, sólo va a perder 500 gramos.
¿Qué haces entonces? ¿Comes menos? ¿Haces más ejercicio?
¿Qué haces cuando tu cuerpo no responde como lo esperabas?
Te desesperas, sientes que nada funciona, que hay algo que no sirve dentro de ti, y caes en la desesperación.
Y luego de eso, sientes que has fracasado.
Es un escenario que se repite una y otra vez, y no dejará de repetirse a menos que cambies el enfoque y dejes de cometer el error que cometiste al principio: plantearte una meta en base a algo que no puedes controlar.
¿Qué es lo que tienes que hacer entonces para garantizarte el éxito?
Resultados Versus Cumplimiento
Plantéate tus metas en términos de algo que dependa de ti, algo que tú sí puedas controlar.
Por ejemplo, en lugar de decir «voy a perder 5 kilos» (algo que no depende de ti y que tú no puedes controlar) di «voy a comer un desayuno rico en proteínas todos los días de esta semana».
¿Ves la diferencia?
Tomar o no el desayuno es algo que depende enteramente de ti y que puedes controlar perfectamente. Si en tu caso particular no es así, simplemente escoge algo que dependa de ti y que puedas controlar.
¿Por qué esta diferencia es tan importante?
Bueno, primero que nada, al ser algo que depende de ti, sólo tú decidirás cómo lo llevarás a cabo. Está en ti escoger de qué manera cumplirás con tu objetivo, y eso hará que sea más fácil hacerlo.
Segundo, al ser algo que tú sí puedes controlar, estará en tus manos hacerlo o no. De esa forma, tendrás todo lo necesario para lograr lo que te propones, pues el éxito lo medirás en función de que hayas o no cumplido con eso uqe te propuesiste.
Pero justamente por esto que acabo de decirte es que tienes que tenr mucho cuidado en la forma en que te planteas tu objetivo…
Propónte Sólo Cosas Que Tengas la Seguridad que Cumplirás
Más vale comenzar con algo pequeño y cumplirlo (y sentirte maravillosamente bien con tu logro) que proponerte algo casi imposible para ti y no cumplirlo (y sentirte como un fracaso, una vez más).
En Venezuela decimos que «hay que arroparse hasta donde le llegue la cobija».
En otras palabras, sólo tú sabes lo que puedes lograr. Sólo tú sabes lo que debes proponerte.
Éste es el principio que utilizo con mis clientes de mis programas de coaching y mis cursos, y es por eso que ellos tienen tantísimo éxito: han entendido cómo plantearse objetivos que pueden cumplir, los cumplen, y miden su éxito en función de ese cumplimiento.
¿Y los otros resultados, como el peso o las medidas?
Siempre llegan. Siempre.
Sólo que esta vez no se relacionan directamente con aquellos 15 kilos que querían perder al comienzo, sino que se expresan en centímetros menos, en tallas de ropa que han bajado, en una vitalidad enorme, en un mejor humor, en sentirse bien consigo mismos, y en otra cantidad enorme de beneficios que vienen del hecho de haber podido – finalmente – cambiar su estilo de vida. Para siempre.
Y todo gracias a que se centraron en el cumplimiento de los pequeños cambios que se propusieron. Cambios que sólo dependieron de ellos, cambios que ellos podían controlar. Y lo lograron.
Mi Nuevo Reto Fitness
Como te dije arriba, tengo un mes para ponerme muy en forma.
He venido deshaciéndome de la grasa en exceso de forma muy progresiva desde hace varios meses, pero aún me falta un poco para verme como quiero y ahora necesito obtener resultados un poquito más rápido…
…¡¡porque el 6 de octubre estaré volando nada más y nada menos que a Londres para encontrarme con mi querida amiga y modelo a seguir, Jennifer Nicole Lee (JNL), para su evento internacional Fitness Model Factory!!
De hecho, justamente la semana pasada JNL me entrevistó a mí y a dos amigas más de Europa (que también viajarán a Londres para el evento) para su podcast de esta semana. Puedes escucharlo aquí (está en inglés):
Como ya te imaginarás, estoy contentísima y súper emocionada con el Fitness Model Factory de Londres, así que me he propuesto iniciar este nuevo Reto Fitness de un mes.
Y he comenzado con lo más importante: la planificación.
Ya te iré contando (por la página de Mi Nueva Dieta en Facebook y por el correo electrónico) cómo me va 😉
Por ahora, espero que te haya gustado el artículo de hoy. La semana que viene volveré con más avances sobre mi nuevo Reto Fitness y más consejos para ti.
Y Ahora, Cuéntame Sobre Ti
¿Alguna vez te has propuesto llograr una meta en base a tu cumplimiento y no en base a resultados?
¿Cómo crees que esta nueva forma de plantearte tus objetivos te podrá ayudar de ahora en adelante en tus metas de adelgazamiento?
Cuéntame en los comentarios. Incluso sería genial si te animas de una vez a proponerte una pequeña meta que puedas comenzar a implementar desde hoy mismo, en función de algo que dependa de ti y que puedas controlar. ¿Qué te propones hacer?
[…] te lo comenté en el artículo de la semana pasada, debes evitar cometer el error de enunciar tus objetivos en función de algo que tú no puedes […]
Hola… me encantó el artículo.
A mi me pasaba un poco eso, pero desde que seguí tu programa dejé de actuar así y ahora sigo bajando de peso, al fin ya sé comer saludable!, ya sé no tener remordimientos cuando «me paso», y he aprendido a ser paciente y llegó la recompensa.
Mi meta en este mes es al menos 6 días comida saludable y, al menos 4, de ejercicio tipo JNL.
Buenas vibras para tod@s!!!.
Se parece muchísimo a mi meta Mila. Vas excelente y estoy felicísima por tus logros, eres todo un ejemplo a seguir! Un besazo.
Hola chica de la dieta. No sé si te acuerdas de mi, una vez te escribí mi historia personal y pidiendo tu ayuda. Tu respuesta fue que no podías ya que mi problema era más bien trastorno alimenticio. Igualmente te he estado siguiendo y me alegra muchísimo que vuelvas a crear este blog.
En los últimos 4 años he sufrido subidas y bajadas bruscas de peso y eso ha causado que tenga resistencia insulinica.
Esto complica más las cosas, ya que no es aconsejable realizar una dieta cetogenica (muy baja de HC y alta en grasa) ni siquiera una dieta alta en proteínas ( por la reacción neoglucogenesis).
Así que mi pregunta es cómo debo comer y en qué proporción de nutrientes. Me interesa lograr la flexibilidad metabólica y bajar el exceso de grasa central.
Agradezco tu atención.
Saludos y abrazos.
Hola Yasmina, buen día 🙂 Encontré tu comentario en el blog de la chica de la dieta, y me gustaría poder responder acerca de la duda que tienes. Primeramente es muy importante que tengas un control con tus niveles de insulina, ya que el primer paso para desatar una diabetes tipo 2 es tener una resistencia insulínica, debes de tener mucho cuidado con eso, así que es muy importante que consultes con tu médico. En cuanto a la dieta, lo mejor para ti y para personas con resistencia insulínica, es llevar una dieta que no contengan alimentos que eleven tu índice glucémico, ya que es importante mantener tus niveles de glucemia en rangos normales. Los alimentos que elevan tu índice glucémico, son los azúcares y las harinas refinadas. Las harinas refinadas son las que provienen de el pan blanco (bolillo, pan de caja, tortillas de harina, pan de dulce, etc.), lo mejor sería eliminar, o por lo menos bajar su consumo lo más posible de la dieta. Y tampoco es nada recomendable llevar dietas hiperproteícas, pueden que al principio funcionen y no sientas «hambre» o ansiedad de comer dulces o harinas, pero va a llegar un momento en que tu cuerpo te pedirá glucosa a gritos, y lo primero que comerás son esos azúcares y harinas 🙁 entonces no es nada recomendable. Yo te puedo sugerir una dieta balanceada, que incluya hidratos de carbono, proteínas y grasas. Un tip clave para no tener los famosos picos de insulina y mantenerla en niveles normales, es siempre combinar los carbohidratos con las proteínas, es decir, que por una porción de HC te comes una porción de proteína, son 15 g. de HC por 7 g. de proteína.
Y otra cosa importante, es que debes hacer al menos 5 comidas al día, igual para mantener la insulina en sus rangos 🙂
Espero haberte ayudado, de cualquier modo, La Chica de la Dieta seguramente puede darte muy buenos consejos en base a su experiencia 😉
Saludos 🙂
Hola Yasmina, almento mucho no haberte podido ayudar en aquella ocasión. Además de lo que te comentó Rocía (excelentes consejos Rocío, muchas gracias!) recuerda que es importante que consumas buenas fuentes de grasas. No necesitas preocuparte por las proporciones ni tampoco necesitas hacer dietas tan estrictas como la cetogénica. Simplemente eliminar progresivamente todo tipo de azzúcares y harinas procesadas, inlcuir siempre proteínas en tus comidas, y no olvidar consumir grasas saludables provenientes de aceite de oliva, aguacate, semilals y frutos secos naturales, pescados azules y si es posible un suplemento de omega 3 de buena calidad. Todo esto te ayudará a acelerar tu metabolismo e irá disminuyendo la inflamación, lo que a su vez te ayudará a recuperar la sensibilidad a la insulina.
Un abrazo!
Es novedoso para mí lo que dices, eso de la separación entre lo que depende de mi cumplimiento y sólo de él. Así planteado, me propongo como meta reprograma lo de proveer la proteina en el desayuno. Besos
Hola, puchis, me ha costado un millón bajar y justamente debe ser por lo que explicas…. hoy comenzaré a bajar el consumo de pan, sí o sí.