Sé lo que te está pasando: el confinamiento te descontroló por completo tus comidas y te está dando hambre a toda hora.
Así que te estás preguntando: "¿Qué será lo que me puedo comer que no me engorde y que me calme esta ansiedad que me está dando?".
Cuando se trata de ansiedad por comer, de hambre un poco descontrolada y antojos a deshoras, el problema tiene tres componentes. En este video te digo cuáles son y te doy 3 soluciones que puedes implementar para controlar, e incluso eliminar, esos ataques de ansiedad de forma saludable y efectiva.
¿Tienes preguntas que te gustaría aclarar?
Envíamelas aquí y podré responderlas en un próximo video
Los tres componentes de la ansiedad por comer
- Componente fisiológico: El tener valores desequilibrados y/o cambios bruscos en los niveles de insulina y de azúcar en sangre puede producir atacques de ansiedad.
- Componente ambiental: La disponibilidad de los alimentos, eventos o personas que asocias con ciertas comidas y la visualización o el recuerdo del consumo de ciertos alimentos puede hacerte desear comerlos incluso si no tienes hambre en el momento.
- Componente psicológico: Cuando te invaden las emociones, ya sean positivas o negativas, te da el ataque de ansiedad por comer porque te has acostumbrado a usar la comida como forma de alivio, o bien porque, en el momento, es tu única forma de gestionar esas emociones (no sabes hacerlo de otra forma).
La ansiedad por comer es un problema complejo y serio que no se resuelve comiendo una fruta, tomando agua o mascando chiclets
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Comienza con estas soluciones para controlar la ansiedad
- Ten a disposición y a la vista los alimentos más saludables (agua en lugar de refrescos o zumos; fruta en lugar de galletas) y haz que los alimentos menos saludables (o más problemáticos para ti) estén menos visibles y sean más difíciles de consumir. Un aspecto que te ayuda a controlar la ansiedad por las tardes, y que no mencioné en el video, es el comer un desayuno rico en proteínas.
- Evita comprar demasiados alimentos poco saludables o que te resultan problemáticos. Hay una excepción: compra ese alimento que te encanta y que de verdad te hace feliz cuando lo comes. No es un asunto de prohibirte ni restringirte, sino de cuidarte y, a la vez, saber disfrutar con placer y sin culpabilidad aquello que realmente te gusta.
- Cuando te dé el ataque de ansiedad, come aquello que estás deseando comer, sin tratar de aguantarte ni retrasarlo. No le des largas y no te prohibas el alivio que necesitas en un momento de dificultad. Sé amable contigo, sobre todo en los malos momentos que es cuando estás más frágil.
El problema de la ansiedad por comer es complejo y serio, y no se elimina con soluciones superficiales y temporales como el comer una fruta, tomar agua, cepillarte los dientes o masticar chiclets.
Tómate en serio y ve a la raíz del problema. No hay alimentos mejores o peores para comer cuando tienes un ataque de ansiedad. Simplemente ve aprendiendo a gestionarlo, resolviendo las verdaderas razones de tu descontrol, ya sean fisiológicas, embientales o emocionales, y verás como poco a poco te vas liberando del monstruo de la ansiedad de comer.
¿Cuál de los 3 componentes de la ansiedad por comer puedes mejorar?
Ahora que ya vas entendiendo mejor el problema, ¿por dónde piensas que podrías comenzar a solucionarlo?
Cuéntame en los comentarios y, como siempre, si te gustó el video dale "like" y comparte este artículo con otras personas a quienes de seguro también les podrá servir.
Gracias Maricarmen por estar presente siempre y tratar de ayudarnos en todas las situaciones que se nos presentan
Estoy suuuper ansiosa, no puedo parar de golosear especialmente en las noches. Gracias a sus sugerencias voy a tener más visibles snack saludables para ayudarme
Espero que estos consejos te ayuden Victoria! Son tiempos difíciles y tenemos que ternos paciencia <3
[…] un artículo anterior estuvimos hablando de cómo controlar la ansiedad por comer y muchos de mis seguidores me han comentado que están teniendo problemas con el […]
Hola Maricarmen, los consejos que das para evitar comer lo más dañino son válidos, pero a mi, si se me antoja algo en específico no lo puedo sustituir con alguna fruta o jugo. Evitó tener en casa lo que me gusta mucho, pero a veces de plano salgo a comprarlo. Afortunadamente no es muy a menudo., y creo que mi ansiedad es más psicológica .porque me encuentre aburrida o cansada del día.
Así es Martha! Ese es el caso que indico en el tercer punto. No todo es cuestión de sustituir o de evitar, a veces el mejor remedio es aceptar y soltar 🙂
A mí me está pasando eso justamente. Tenía super controlado el tema de las harinas que son mi perdición pero ahora con todo esto me descontrolé. Y ya subí un par de kilos en estos dos meses. Estuve mirando todos tus videos y artículos sobre la ansiedad pero no logro poner en práctica nada 😥. Lo que más me puede en el mundo es la pizza, nunca tengo en casa pero a veces pido, una vez cada dos semanas más o menos. Pienso que sí tuviera en casa solo comería pizza! A veces pienso que la única solución es que todo esto se acabe de una vez, pero parece lejano.
Es complicado para todos Laura 🙁
Y, en efecto, no parece que vayamos a «volver» muy pronto. Así que aceptación y adaptación. Mucho ánimo <3
Como siempre es un privilegio escucharte, en todos los medios, blog, y demás yerbas, eres muy grosa como dicen los jóvenes!!!!!!!!
Mil gracias Mariel!! 😀 <3